Niños, niñas y jóvenes gravemente vulnerados en sus derechos en la Villa O’Higgins
Con fecha 26 de enero de 2011, la Red Comunal de Infancia y contra la VIF La Florida, da a conocer los siguientes hechos:
Entre enero y marzo del 2009, un grupo de niñas del sector de la Villa O’higgins de la comuna de La Florida, fueron víctimas de abuso sexual, con características de explotación sexual comercial, por parte de Hermano Franciscano de la 3ª orden, Sr. Rodolfo Arredondo, quien residía en parroquia del sector.
Estos hechos fueron develados por una de las niñas al equipo de trabajo de La Casona de los Jóvenes, organismo colaborador de SENAME, que trabaja en el lugar. Frente a los antecedentes, los responsables de dicha organización, junto a una de las familias, realizan denuncia, la que se deriva a Fiscalía Local de La Florida.
Frente a la gravedad de los hechos y la preocupación por la falta de respuestas tendientes a la protección de las víctimas, La Casona deriva los casos a la Red Comunal, en su rol de garante de derechos de niños, niñas y adolescentes, con la intensión de activar y monitorear las acciones seguidas en cuanto la denuncia realizada en Fiscalía. En este momento se constatan deficiencias en las diligencias realizadas y los plazos excesivamente prolongados que se toman para citar a las víctimas. Desde el fiscal a cargo, Sr. Gustavo Ahumada, y profesionales de URAVIT, se refiere a la ausencia de antecedentes que ameriten el inicio de un proceso de investigación y la evaluación contraria a la derivación de los casos a procesos de reparación del daño.
Paralelamente, estas situaciones son informadas a Dirección Regional de SENAME, quienes en julio de 2009 presentan querella a favor de las niñas víctimas.
En septiembre de 2009, frente a los antecedentes de que las niñas recibían dineros y otros beneficios materiales a cambio del abuso, se inicia proceso de derivación y vinculación de uno de los casos al Centro Remolinos, dependiente de ONG Cordillera, también organismo colaborador de SENAME, especializado en reparación de niños, niñas y adolescentes de la comuna de La Florida víctimas de explotación sexual comercial.
En enero del 2010, se solicita medida de protección en el 2º juzgado de familia de Santiago a favor de las niñas y la designación de un curador ad litem de ACHNU. Dicha medida no se acoge.
En marzo del 2010, La Casona deriva dos nuevas niñas para procesos reparatorios en Remolinos.
En mayo del 2010 se informa, en relación a denuncia realizada por La Casona, que ha sido terminada por suspensión condicional del procedimiento. Sin embargo, durante el tiempo transcurrido entre la denuncia y el término de esta, se desconocen los procedimientos ejecutados por fiscal designado. Esta desinformación también es referida por las propias familias.
En julio del 2010, frente a la constatación de los antecedentes de explotación, el Centro Remolinos también genera instancia de comunicación y coordinación directa con Fiscal Jefe de La Florida, Sr. Rodrigo Lazo, en consideración de la poca claridad del proceso investigativo y la disconformidad frente al término de la causa. No hubo mayores avances, salvo una reunión con profesional de URAVIT, Sra. Ana María Salinas, quien aclaró los procedimientos llevados a cabo, las razones del término de la causa y la evaluación que realizaron en cuanto a considerar que no era pertinente que las niñas fueran derivadas a un proceso de reparación.
Los hechos referidos han sido reconocidos públicamente por las familias de las víctimas y las y los vecinos del sector, lo que ha generado una actitud activa en el reconocimiento de las víctimas de estas graves vulneraciones, reaccionando frente a la impunidad en la que se encuentra el victimario.
En enero del 2011 se ingresa una cuarta niña a Centro Remolinos, por derivación realizada por La Casona de Los Jóvenes.
A partir de los acontecimientos señalados, surgen aspectos que generan preocupación frente a las vulneraciones que han sido víctimas las niñas y en relación al actuar de algunas de las instituciones involucradas en estos casos.
En primer lugar surge la preocupación por el papel que ha asumido un sector de la Iglesia. Particularmente el rol asumido por Sr. Jorge Solís, responsable de parroquia Santa Cruz de Mayo aledaña a La Casona, sector donde Sr. Arredondo habría cometido los abusos. Desde estas instancias se han desconocido los hechos referidos por las niñas, junto con invalidar el trabajo de los proyectos que se han involucrado en la protección de los casos, específicamente de La Casona. Muy por el contrario, se ha asumido una actitud de protección hacia Sr. Arredondo.
La situación ha llegado al extremo de que el Sr. Jorge Solís ha centrado los hechos en una disputa interinstitucional (con La Casona), confundiendo el foco de atención que debe existir por las graves vulneraciones que han afectado a las niñas, y que cabe la posibilidad cierta que hayan otros niños del sector involucrados. Para esto ha hecho uso de recursos propios de sus funciones parroquiales (prédica, entrega de beneficios), para difundir su postura e involucrar a miembros de la comunidad en el conflicto (vecinos, escuela).
Un segundo punto de análisis es el proceder de Fiscalía Local de La Florida (y respectiva URAVIT). Más allá de que han referido haber cumplido con los procedimientos establecidos para su actuar, no deja de llamar la atención que la causa por la denuncia de estos hechos haya sido terminada sin ninguna sanción hacia el victimario y, lo que resulta más difícil de comprender, sin ni siquiera haber iniciado proceso de investigación, bajo el argumento de que no hubo antecedentes válidos para esto. En ese sentido, cabe destacar que no existió comunicación con ninguno de los profesionales de las instituciones que han atendido a las niñas durante este tiempo (salvo explícita solicitud de las propias instituciones). Además, la referencia que permanentemente realizan las propias niñas y sus familias, es que no participaron en ninguna diligencia solicitada por fiscalía o, en aquellas realizadas, nunca entendieron las implicancias.
Tampoco se consideró la pertinencia de que las víctimas participaran en procesos de diagnóstico del daño y posterior intervención reparatoria, siendo que los hechos han demostrado la existencia de vulneraciones.
Un tercer elemento es la constatación de que han existido situaciones de vulneración que han afectado a las niñas del sector. En ese sentido, los antecedentes de explotación referidos por La Casona de los Jóvenes, son validados a partir de proceso de diagnóstico de daño que se ha realizado y se continúa haciendo actualmente con otros casos por parte de proyecto especializado Remolinos. Por ahora, una de las niñas devela situación en que Sr. Arredondo tuvo conductas sexuales con ella, con entrega de dinero de por medio. Otras dos no han develado, pero existen relatos indirectos que las relacionan con los hechos, además de otros indicadores específicos que continúan siendo evaluados. Hay una cuarta niña que comenzará fase de diagnóstico durante enero del presente año.
A partir de lo anterior, como Red Comunal de Infancia y contra la VIF de La Florida declaramos y exigimos frente a las instancias correspondientes:
Preocupación por que los hechos sean debidamente investigados.
Reconocimiento de la gravedad en las vulneraciones de las que han sido víctima a lo menos 4 niñas del sector de la Villa Ohiggins.
Valorar las acciones proteccionales y reparatorias a favor de las víctimas llevadas a cabo por instituciones miembros de la Red Comunal de Infancia, como La Casona de los Jóvenes y Centro Remolinos de ONG Cordillera.
Preocupación por el rol que han cumplido instituciones claves en el entramado público, sobretodo en su rol de protección hacia las víctimas de vulneraciones, instancias relacionadas con la Fiscalía Local de La Florida y Parroquia Santa Cruz de Mayo.
Por lo anterior, exigimos un rol activo en la promoción, prevención y reparación de situaciones de vulneración de derechos en situaciones como esta, así como en cualquiera que se vean afectados niños, niñas y adolescentes.
EQUIPO COORDINADOR
RED COMUNAL INFANCIA Y CONTRA LA VIF - LA FLORIDA
Enero 2011
Con fecha 26 de enero de 2011, la Red Comunal de Infancia y contra la VIF La Florida, da a conocer los siguientes hechos:
Entre enero y marzo del 2009, un grupo de niñas del sector de la Villa O’higgins de la comuna de La Florida, fueron víctimas de abuso sexual, con características de explotación sexual comercial, por parte de Hermano Franciscano de la 3ª orden, Sr. Rodolfo Arredondo, quien residía en parroquia del sector.
Estos hechos fueron develados por una de las niñas al equipo de trabajo de La Casona de los Jóvenes, organismo colaborador de SENAME, que trabaja en el lugar. Frente a los antecedentes, los responsables de dicha organización, junto a una de las familias, realizan denuncia, la que se deriva a Fiscalía Local de La Florida.
Frente a la gravedad de los hechos y la preocupación por la falta de respuestas tendientes a la protección de las víctimas, La Casona deriva los casos a la Red Comunal, en su rol de garante de derechos de niños, niñas y adolescentes, con la intensión de activar y monitorear las acciones seguidas en cuanto la denuncia realizada en Fiscalía. En este momento se constatan deficiencias en las diligencias realizadas y los plazos excesivamente prolongados que se toman para citar a las víctimas. Desde el fiscal a cargo, Sr. Gustavo Ahumada, y profesionales de URAVIT, se refiere a la ausencia de antecedentes que ameriten el inicio de un proceso de investigación y la evaluación contraria a la derivación de los casos a procesos de reparación del daño.
Paralelamente, estas situaciones son informadas a Dirección Regional de SENAME, quienes en julio de 2009 presentan querella a favor de las niñas víctimas.
En septiembre de 2009, frente a los antecedentes de que las niñas recibían dineros y otros beneficios materiales a cambio del abuso, se inicia proceso de derivación y vinculación de uno de los casos al Centro Remolinos, dependiente de ONG Cordillera, también organismo colaborador de SENAME, especializado en reparación de niños, niñas y adolescentes de la comuna de La Florida víctimas de explotación sexual comercial.
En enero del 2010, se solicita medida de protección en el 2º juzgado de familia de Santiago a favor de las niñas y la designación de un curador ad litem de ACHNU. Dicha medida no se acoge.
En marzo del 2010, La Casona deriva dos nuevas niñas para procesos reparatorios en Remolinos.
En mayo del 2010 se informa, en relación a denuncia realizada por La Casona, que ha sido terminada por suspensión condicional del procedimiento. Sin embargo, durante el tiempo transcurrido entre la denuncia y el término de esta, se desconocen los procedimientos ejecutados por fiscal designado. Esta desinformación también es referida por las propias familias.
En julio del 2010, frente a la constatación de los antecedentes de explotación, el Centro Remolinos también genera instancia de comunicación y coordinación directa con Fiscal Jefe de La Florida, Sr. Rodrigo Lazo, en consideración de la poca claridad del proceso investigativo y la disconformidad frente al término de la causa. No hubo mayores avances, salvo una reunión con profesional de URAVIT, Sra. Ana María Salinas, quien aclaró los procedimientos llevados a cabo, las razones del término de la causa y la evaluación que realizaron en cuanto a considerar que no era pertinente que las niñas fueran derivadas a un proceso de reparación.
Los hechos referidos han sido reconocidos públicamente por las familias de las víctimas y las y los vecinos del sector, lo que ha generado una actitud activa en el reconocimiento de las víctimas de estas graves vulneraciones, reaccionando frente a la impunidad en la que se encuentra el victimario.
En enero del 2011 se ingresa una cuarta niña a Centro Remolinos, por derivación realizada por La Casona de Los Jóvenes.
A partir de los acontecimientos señalados, surgen aspectos que generan preocupación frente a las vulneraciones que han sido víctimas las niñas y en relación al actuar de algunas de las instituciones involucradas en estos casos.
En primer lugar surge la preocupación por el papel que ha asumido un sector de la Iglesia. Particularmente el rol asumido por Sr. Jorge Solís, responsable de parroquia Santa Cruz de Mayo aledaña a La Casona, sector donde Sr. Arredondo habría cometido los abusos. Desde estas instancias se han desconocido los hechos referidos por las niñas, junto con invalidar el trabajo de los proyectos que se han involucrado en la protección de los casos, específicamente de La Casona. Muy por el contrario, se ha asumido una actitud de protección hacia Sr. Arredondo.
La situación ha llegado al extremo de que el Sr. Jorge Solís ha centrado los hechos en una disputa interinstitucional (con La Casona), confundiendo el foco de atención que debe existir por las graves vulneraciones que han afectado a las niñas, y que cabe la posibilidad cierta que hayan otros niños del sector involucrados. Para esto ha hecho uso de recursos propios de sus funciones parroquiales (prédica, entrega de beneficios), para difundir su postura e involucrar a miembros de la comunidad en el conflicto (vecinos, escuela).
Un segundo punto de análisis es el proceder de Fiscalía Local de La Florida (y respectiva URAVIT). Más allá de que han referido haber cumplido con los procedimientos establecidos para su actuar, no deja de llamar la atención que la causa por la denuncia de estos hechos haya sido terminada sin ninguna sanción hacia el victimario y, lo que resulta más difícil de comprender, sin ni siquiera haber iniciado proceso de investigación, bajo el argumento de que no hubo antecedentes válidos para esto. En ese sentido, cabe destacar que no existió comunicación con ninguno de los profesionales de las instituciones que han atendido a las niñas durante este tiempo (salvo explícita solicitud de las propias instituciones). Además, la referencia que permanentemente realizan las propias niñas y sus familias, es que no participaron en ninguna diligencia solicitada por fiscalía o, en aquellas realizadas, nunca entendieron las implicancias.
Tampoco se consideró la pertinencia de que las víctimas participaran en procesos de diagnóstico del daño y posterior intervención reparatoria, siendo que los hechos han demostrado la existencia de vulneraciones.
Un tercer elemento es la constatación de que han existido situaciones de vulneración que han afectado a las niñas del sector. En ese sentido, los antecedentes de explotación referidos por La Casona de los Jóvenes, son validados a partir de proceso de diagnóstico de daño que se ha realizado y se continúa haciendo actualmente con otros casos por parte de proyecto especializado Remolinos. Por ahora, una de las niñas devela situación en que Sr. Arredondo tuvo conductas sexuales con ella, con entrega de dinero de por medio. Otras dos no han develado, pero existen relatos indirectos que las relacionan con los hechos, además de otros indicadores específicos que continúan siendo evaluados. Hay una cuarta niña que comenzará fase de diagnóstico durante enero del presente año.
A partir de lo anterior, como Red Comunal de Infancia y contra la VIF de La Florida declaramos y exigimos frente a las instancias correspondientes:
Preocupación por que los hechos sean debidamente investigados.
Reconocimiento de la gravedad en las vulneraciones de las que han sido víctima a lo menos 4 niñas del sector de la Villa Ohiggins.
Valorar las acciones proteccionales y reparatorias a favor de las víctimas llevadas a cabo por instituciones miembros de la Red Comunal de Infancia, como La Casona de los Jóvenes y Centro Remolinos de ONG Cordillera.
Preocupación por el rol que han cumplido instituciones claves en el entramado público, sobretodo en su rol de protección hacia las víctimas de vulneraciones, instancias relacionadas con la Fiscalía Local de La Florida y Parroquia Santa Cruz de Mayo.
Por lo anterior, exigimos un rol activo en la promoción, prevención y reparación de situaciones de vulneración de derechos en situaciones como esta, así como en cualquiera que se vean afectados niños, niñas y adolescentes.
EQUIPO COORDINADOR
RED COMUNAL INFANCIA Y CONTRA LA VIF - LA FLORIDA
Enero 2011